En un entorno digital colmado de nuevas aplicaciones y servicios, el verdadero diferencial no está en la novedad, sino en la capacidad de conectar de manera auténtica con los usuarios. La clave: desarrollar productos simples, inteligentes y confiables.
“Hoy, los productos que destacan no son los más complejos, sino los que saben generar valor de forma simple, adaptada al usuario y con soporte tecnológico inteligente”, señala Katherine Prendice, Digital Offer Manager para Sudamérica de Softtek.
Según la especialista, existen factores fundamentales para diseñar productos digitales efectivos en el contexto actual, que son los siguientes:
1.- Branding y diseño centrado en humanos: la experiencia debe ser intuitiva, emocional y atractiva. Asombrar con lo visual, emocionar con contenido relevante y permitir la personalización son claves para generar conexión.
2.- Ingeniería digital con IA integrada: los productos actuales no son unidades aisladas, sino parte de ecosistemas interconectados. Herramientas como frameworks inteligentes permiten acelerar el desarrollo, realizar pruebas con datos sintéticos y mejorar la calidad desde etapas tempranas.
3.- Cultura digital en las organizaciones: adoptar una mentalidad ágil, fomentar la colaboración entre equipos y alinear los esfuerzos a indicadores de valor son condiciones necesarias para sostener el crecimiento de un producto.
4.- Plataformas tecnológicas confiables y seguras: la arquitectura debe ser modular, escalable, predecible y segura desde el primer día. El monitoreo inteligente, permite detectar fallos antes de que ocurran y reducir tiempos de respuesta.
La inteligencia artificial cumple un rol transversal. Ya no es una función aislada, sino una tecnología integrada en todas las etapas del ciclo de vida de un producto digital.
“No existe un sector que no esté siendo transformado por la IA, las empresas diseñan, prueban y escalan sus soluciones digitales. Tecnologías como los asistentes virtuales, la generación automática de documentación, los sistemas de recomendación, y la aceleración del desarrollo de productos, son ahora parte de un nuevo estándar en el desarrollo digital”.
“Los productos digitales exitosos no son los que prometen más, sino los que simplemente funcionan. Y detrás de esa aparente simplicidad, hay un modelo estratégico bien definido, donde la inteligencia artificial potencia el talento humano para ofrecer soluciones realmente efectivas”.